Cada vez hay más opciones de productos de maquillaje en el mercado, y el rubor no es la excepción, aprende a elegir el rubor perfecto para ti, para que crees el look perfecto y destaques el área de las mejillas dándoles un toque de color.
Desde hace décadas las mujeres usan el rubor para destacar sus mejillas, aunque en la antigüedad se usaban productos naturales, como el betabel, en la actualidad hay una gran variedad de productos que te ayudarán a destacar esta área del rostro. Conoce las diferentes fórmulas y texturas, para que elijas el producto con el que te sientas más cómoda y obtengas un look natural.
Pruébate diferentes productos
Si una versión y color de rubor te llama especialmente la atención, lo más recomendable es que te lo pruebes, no pierdes nada con ver cómo luce y si no te gusta no tienes que comprarlo, pero si te gusta formará parte de tu cosmetiquera. Puedes experimentar con diferentes tonos hasta que encuentres el que más te guste, no tengas miedo.
Conoce las distintas versiones de rubor
Puedes encontrar los rubores en diferentes presentaciones. Las versiones de rubor en polvo le dan un acabado mate y luminoso al look, por lo que es adecuado para las mujeres con la piel grasa. Es fácil controlar la cantidad de producto que se debe utilizar, aplica el rubor con una brocha mediana o con una brocha biselada hasta llegar al tono deseado, así podrás distribuir de manera más uniforme el producto. Además es de larga duración.
El rubor en crema, viene en diferentes presentaciones en barra o en crema, se puede aplicar con una brocha mediana o biselada, con una esponja, o con los dedos, y posteriormente se debe difuminar delicadamente hasta que se funda con la piel. Existen versiones brillantes y mate. Este producto es ideal para las mujeres con la piel seca o mixta, ya que es más hidratante. Esta presentación ayuda a crear una gran variedad de efectos, ya que se tiene más control sobre la zona que se va a maquillar.
La versión líquida es ideal para usarla en el día a día, ya que se puede controlar la intensidad del color dependiendo de la cantidad de capas que se apliquen. Sin embargo, es ideal para las expertas en maquillaje, ya que no es tan fácil de usar. El truco es aplicar unas pequeñas gotas en las mejillas y distribuirlas con pequeños golpecitos.
Elige el color adecuado dependiendo del tono de tu piel
Si tienes la piel clara, lo ideal es que elijas los rubores que tienen pigmentos rosados, coral y durazno, así como los tonos fríos. Evita los productos intensos, ya que lucen exagerados y falsos.
Si tu piel es morena clara puedes utilizar la mayoría de los colores de rubores sin problema, como los rosas, durazno, rojos y bronceados. Si tu piel es amarillenta prefiere los rubores cálidos, como el rosa y el durazno medios, e incluso el bronzer cálido.
Las morenas deben optar por los rubores de colores fuertes, como el fucsia, mandarina y café cálido, se deben fundir bien en la piel para conseguir un efecto ruborizado natural.
Toma en cuenta la hora para elegir el acabado del rubor
Es esencial que tomes en cuenta la luz a la que te vas a exponer al elegir el acabado del rubor. En el día a día, que generalmente estás bajo la luz de la oficina o la luz solar, lo ideal es evitar el acabado brillante, prefiere las fórmulas mate. Para la noche, que es cuando se busca destacar, los rubores brillantes son ideales.