Es el nombre por el que se ha dado a conocer a Occidente la ciudad de Saidia. Antes apodada La perla azul.
Se encuentra en una zona geográfica (costa mediterránea) en la que se puede disfrutar de un clima subtropical y unas playas sin igual. Dispone de alrededor de 14km de playa de fina y abundante arena rodeadas de un esplendoroso parque natural. Además, con la peculiaridad de encontrarse en la costa Mediterránea a 50 km al norte de Oujda y Nador y a una hora de carretera desde la ciudad de Melilla. Ambas accesibles por barco o por avión, lo que la hace aún más atractiva como destino para las vacaciones.
La historia de Saidia es bastante corta comparada con la de Marruecos. Actualmente tiene menos de 18.000 habitantes. Fue fundada alrededor de 1548, cuando en 1881, el sultán Hassan I creó una ciudadela en la zona. En 1931, formó parte del protectorado Francés y tras la independencia marroquí, se convirtió en el principal centro turístico del Norte de Marruecos.
El Gobierno de Marruecos diseñó el plan AZUR, encaminado al desarrollo turístico de Marruecos; dentro de este plan, Saidía fue elegida como el mejor enclave paisajístico y natural de la costa mediterránea marroquí. Y todo apunta a que terminará convirtiéndo se en una de las estaciones balnearias más demandadas.
No hay que olvidar que se puede aprovechar la estancia en Saïdia para visitar Oujda. Es una ciudad que posee una bella medina cuya Kasbah —la antigua ciudadela— se impone sobre una escuela coránica del siglo XIV. También tiene coloridos mercados y lugares de ensueño por visitar, donde por ejemplo uno se puede deleitar escuchando música garnatí, los melancólicos acordes árabe-andalusíes.