Vivimos en un país, que a nivel mundial, es bastante reconocido por sus turismo y gastronomía.
Respecto a lo que a turismo se refiere, nuestras playas mediterráneas son el punto de mira para viajar en vacaciones de muchos extranjeros, mayoritariamente de Europa.
Si hablamos de gastronomía, tampoco nos quedamos atrás, nuestras paellas, mundialmente conocidas, o en general, lo que se conoce como dieta mediterránea, una dieta bastante saludable según los médicos.
No sólo gozamos de una buena comida, también tenemos la suerte de contar con multitud de viñedos de los que salen numerosos vinos que suenan en todas partes del mundo.
Un turismo diferente
Hasta hoy en día, el turismo en España se ha centrado por lo general en las playas del levante y de la Costa Del Sol.
Por lo general, estos, siempre han sido los sitios para viajar más elegidos, ya que a todos nos encanta broncearnos y disfrutar del sonido que hacen las olas cuando rompen.
No obstante, también tenemos la suerte de tener bosques con mucho encanto, y lo que hasta ahora era un turismo nacional se ha abierto paso en este sector y ha pasado a ser un destino que muchos extranjeros están comenzando a elegir a la hora de ir de viaje, no sólo por su belleza.
Al encanto de esos paisajes tan naturales y rústicos, se le ha sumado la gastronomía, y evidentemente, para los amantes del vino, ¿qué mejor que acompañar un plato casero con una copa de un buen Rioja?
El enoturismo
Para quienes no conozcáis este término, es simplemente el nombre que se le ha dado al turismo del vino.
Es cierto que hay mucho viaje hacia nuestras playas, pero el enoturismo se está abriendo paso en este sector.
En España, que contamos con una gran variedad de vinos, se ha generado lo que podemos llamar como ‘La Ruta Del Vino’.
Esta ruta no es más que un paseo por los viñedos de nuestra tierra, donde además de poder degustar un buen Ribera Del Duero o un Rioja entre ellos, podemos visitar sus viñedos y fábricas y echar un vistazo a todo el proceso de fabricación.
Seas o no un amante del vino, os recomiendo este viaje, ya que no sólo podemos gozar de estos manjares, además podréis disfrutar de unos paisajes bastante bonitos y relajantes.