Muchas personas han oído hablar del Tahín, tahína o tahini, o la pasta de sésamo como un ingrediente exótico en recetas como hummus o baba ganoush. Y les resulta complicado imaginar qué otros usos pueden darle a esta densa pasta hecha de semillas en platos cotidianos.
¿Qué es el tahín?
El es el resultado de triturar semillas de sésamo crudas o tostadas. No lleva ningún aditivo más. Como sucede cuando se trituran frutos secos, las semillas son ricas en grasas saludables, que al ser trituradas emulsionan con la parte sólida del alimento (principalmente fibra y proteína) que forman una pasta con aspecto parecido a un paté.
Cuando la semilla es cruda, la pasta es de color marfil amarillento y su sabor es suave y delicado. Cuando la semilla es tostada, la pasta es de color marrón medio y su sabor es potente e intenso.
Úntalo como una mantequilla
Sobre tostadas, una fina capa le dará un toque de sabor a tu desayuno. Puedes tomarlo solo, dado su intenso sabor, o combinarlo con un poco de mermelada por encima o una loncha de pavo, queso fresco, etc. Combina tanto con dulce como salado.
Enriquece tus bebidas vegetales o batidos
El tahín se disuelve en líquido, por lo que podemos añadir una cucharada en nuestra bebida vegetal parle un aporte extra de calcio (en bebida de avena, de arroz, en horchata), o hacerlo parte de nuestros batidos o smoothies (con fruta, leche y una cucharada de tahin).
Prepara salsas y aliños
Añardir una cucharada sopera a tu salsa, le aportará melosidad y realzará su sabor. Combínalo en tu salsa de tomate, en pesto, en mayonesas, etc. Es una alternativa estupenda para salir de la rutina en las ensaladas (por ejemplo, con una cucharada de tahín, zumo de limón y unas hierbas frescas con yogur griego y podemos preparar un aliño sorprendente).
Relleno de bocadillos, fajitas y sánwiches
¿Tu sándwich mixto te aburre? Unta una de sus caras con tahín y verás como cambia su sabor. Añádelo a tu fajita junto a brotes de lechuga y tomate, atrévete a incluirlo en tu bocadillo de pollo… Combina con carnes, pescados, verdura fresca, etc
Prepara cremas y rellenos dulces
En lugar de usar mantequilla, manteca de cacao o aceite de coco, el tahín sirve para incrementar los nutrientes en nuestras cremas o rellenos dulces. Por ejemplo, mezclado con cacao puro en polvo y melaza, podemos crear una crema de chocolate deliciosa para rellenar un bizcocho o unos sánwiches para merendar.
El tahín se mezcla con miel en la repostería árabe y se usa como relleno y cobertura de hojaldres junto a frutos secos y semillas.
El toque final para tus cremas de verduras
¿Quien no ha añadido a su crema de verduras un chorrito de nata o aceite de oliva para finalizarla? Prueba este mismo proceso con una cucharada de postre de tahín, deja que de disuelva y verás como te sorprende su sabor.