- Género: Solanum
- Especie: Solanum dulcamara
- Familia: Solanáceas
- Origen: Europa
- Características: contiene sustancias que le confieren propiedades medicinales
- Multiplicación: semilla, acodo, esqueje y división de mata
Planta vivaz, que crece postrada o incluso puede trepar sobre algún soporte, y vive en lugares frescos, semisombreados, en bosques, cerca de riachuelos y próxima a viejos muros. Mide desde 60 cm hasta incluso cerca de 2 m. El tallo llega a hacerse leñoso, tiene un sabor amargo al principio y luego se vuelve algo dulzón; tiene pelillos cortos en su superficie. Las hojas tienen forma oval, con pecíolo, las inferiores enteras y las superiores hendidas en 3 lóbulos. Las flores, de color violeta y con los pétalos manchados de verde o amarillo en su parte inferior, se agrupan en ramilletes en el extremo de las ramificaciones. El fruto es una baya ovalada, carnosa y de color rojo cuando está maduro. La floración se produce generalmente a lo largo de todo el período templado-cálido.
En la composición de la planta figuran sustancias como la solaneína y la dulcamarina. Los tallos se utilizan en cocimiento por sus propiedades en los casos de bronquitis, asma y eccemas. La esencia de tallos jóvenes se usa con resultados positivos para el tratamiento de afecciones generales de la piel, parálisis nerviosas, reumatismo, enteritis y cistitis y otras enfermedades.
Se han de cosechar los tallos de un año, en días secos de la estación templada, antes de los fríos. Luego, se cortan en trozos de 2-4 cm de longitud y se les hace una hendidura longitudinal para facilitar el secado y se exponen al sol.
Se emplea en infusiones de 10-30 g por litro de agua, dejando hervir 10 minutos; se toman hasta 3 tazas por día. En uso externo se aplica esta preparación para lavar las zonas afectadas en la piel, empapando compresas que después se dejan sobre la parte enferma para que surtan sus efectos.
La forma usual de multiplicación de la planta es mediante siembra en la estación templada, tras los meses fríos.